miércoles, 25 de noviembre de 2015

Deriva.

A la deriva, en una lucha continua por reconocerte, estas ahí.
Melancólico y misterioso, amante peligroso.
En inútiles intentos por olvidarte, vienes rodeado de huracanes, me hieren, me desmontan, me advierten que tras de ti nada hay, ni luces ni sombras, solo el  vacío de la ausencia.
Buscándote entre  versos y prosa, apareces, mil caras, sólo tu sombra.
Fatal final me espera a tu lado, me suicido en tus besos, en tu abrazo.